SIMULACIóN COMPUTACIONAL

En la mayoría de las disciplinas científicas, se intenta incorporar el uso de modelos computacionales a fin de lograr incluir la mayor cantidad de variables en el comportamiento de un sistema.
En lo referente a la Seguridad contra Incendios, resulta de interés el uso de este recurso, para aplicarlo en dos áreas diferentes.
Por un lado lo vinculado al comportamiento del fuego y los fenómenos relacionados.
Por otro lado, la evaluación de los medios de evacuación, de acuerdo a la tipología y usos edilicios.

El incendio es un fenómeno extremadamente complejo y los factores que intervienen hacen que cada evento sea particular y diferenciable de otro. No obstante, muchos factores pueden mensurarse y preverse, y, sabiendo interpretar los resultados arrojados, estos pueden brindar diferentes opciones de resolución y/o soluciones edilicias: morfología; dimensiones espaciales; ubicaciones de salidas; cantidad, forma y ubicación de aberturas; sistemas de ventilación; sistemas de detección y extinción; etc.

Respecto a la evaluación de medios de salida y comportamiento humano, contamos con las simulaciones de evacuación. Si bien los simulacros de evacuación están establecidos como una práctica cada vez más habitual, es de gran utilidad, complementarlos con herramientas como estas, dado que en muchos casos resulta dificultoso llevarlos a cabo, y los datos relevados, no siempre son certeros o completos debido a la resistencia de las personas o a la falta de rigurosidad en la forma de afrontarlos. Además las variables a analizar se ven limitadas por el tiempo, la cantidad de personas, y otros factores.

Las simulaciones computacionales nos ayudan a contemplar una amplia variedad de posibilidades que podrían suceden en un evento. Por ejemplo, diferentes factores de ocupación, alternativas de salidas, tiempos de preevacuación diversos definidos de acuerdo al rol de los ocupantes, velocidades de desplazamiento, etc.
Asimismo, los simulacros pueden realizarse únicamente en edificios en uso. Pero hay decisiones imprescindibles para tomar en la etapa de diseño, las cuales pueden afrontarse correctamente con herramientas de este tipo.
Las herramientas descriptas son útiles, no para proyectar nuevos edificios o reformular estrategias de seguridad en edificios existentes, sino también como recursos imprescindibles en las etapas de análisis pericial de eventos ya acontecidos, o en el estudio específico a nivel científico de nuevos materiales.
Es decir, son herramientas, que, con la acertada inclusión de datos conocidos (inputs), y la interpretación correcta de los resultados obtenidos (outputs), puede ser utilizada para proyectos, diseños, pericias, análisis científicos, utilización de determinados materiales, etc.
En la Ciudad de Buenos Aires, desde el año 2018 se han implementado las simulaciones computacionales, a través de las exigencias establecidas en la Ley Nº 5920 (Sistema de Autoprotección) y reglamentadas mediante el Decreto 51/18, para determinado grupo de establecimientos de pública concurrencia.